Yeferson Soteldo, el valor del regate para Tigres
En el fútbol a veces la clave está en saber aprovechar la oportunidad. Estar en el momento justo y en el lugar indicado. Poder jugar un pase extra y abrir más de una puerta. Eso es lo que Tigres le da a Yeferson Soteldo, otra oportunidad de mostrar por qué es un jugador distinto.
Yeferson Soteldo, es un jugador diferente. Ha crecido como un extremo sin temor al encare, ofuscado en retar en el uno contra uno a su marca y desbordar en parelelo a la línea de banda o en el límite terrotorial entre el área y callejuela izquierda.
Su aparición en Tigres llega después de un camino sin muchas luces en su último club donde no se sintió lo suficientemente cómodo emocionalmente, pero incluso en ese momento de decaída futbolística en Toronto siguió reclamando en los extremos viajes hacia el carril central, habitualmente a pierna cambiada, para ir al interior del área o a la frontal de arco como objetivos predilectos.
Para Miguel Herrera, un entrenador que distingue mucho de su juego por los extremos el venezolano puede ser un solución por banda derecha o por izquierda. El criollo puede ensanchar el campo, empujando hacia la línea de fondo al lateral rival para contribuir con su decisión e ímpetu encarando constantemente con su agresividad predilecta. Una picardía simbolizada en sus internadas al área en busca del pase final y pocas pérdidas de balón en esa zona (imagen de arriba).
Ahora Tigres tiene un enorme abanico en su juego ofensivo: Florian Thauvin, Nicolás López, Luis Quiñones y Javier Aquino. Así añade otra arma, el encare de Soteldo y el valor de su regate.